Por septima vez visitamos el lugar de nacimiento de Guenter en Silesia (Alemania hasta 1945, Polonia desde entonces). Contados son los alemanes que aún viven en esos lugares por lo que nuestra visita siempre requiere de un interprete.
Como siempre iniciamos nuestro viaje de tres semanas en Pfaffenhofen, Alemania. En el aeropuerto de Munich recogimos el coche que teníamos reservado, esta vez nos dieron un Peugeot Diesel. Alexander que ya nos estaba esperando, se apuntó como copiloto. El y su esposa Eva como de costumbre nos atienden muy bien. Del 10 al 15, estuvimos con ellos, visitamos a mis cuñados que se encuentran bastante bien, a Elsbeth todavía no se le nota mucho el Alzheimer. Nuestro sobrino Peter que hace año y medio sufrió un derrame cerebral, ha recuperado 80% de sus facultades, aún necesita terapia para su pierna y brazo derechos que siguen paralizados, afortunadamente su caracter afable lo mantiene positivo y los encontramos preparandose para su viaje de dos meses a México, su esposa es de Guadalajara y aún tiene papá y hermanos en esa hermosa ciudad, salen el 23de julio y regresarán a mediados de Septiembre.
Alexander nos enseñó fotos de su estancia con Oliver en Washington el pasado Junio. Después nos llevó a su bodega nueva que tiene desde hace un año que se separó de Peter a consecuencia de la enfermedad de éste. El orden y la limpieza sobresalen como en todo lo de Alex. Con la ayuda de Eva ha logrado seguir adelante sin socio. Fusionaron sus dos negocios y ahora la nueva compañía se llama "Böhm Lederwaren und Cosmetics". Compraron una camioneta más grande y se ve que están bien. Guenter le aconsejó que haga un album de presentación con fotos de todo lo que tiene y lo mande al banco con solicitud de aumento de linea de crédito, pues todo está muy bonito y bien cuidado.
Nuestra primer salida es como siempre al panteón a visitar la tumba de Oma y Opa. El domingo 13, fuimos con Herbert y Elsbeth a visitar a su hijo Andreas que vive cerca de Rosenheim en la frontera con Austria con su esposa y sus tres niños. Otro día en la tarde Herbert nos invitó a una reunión de su club de paisanos de Silesia y Guenter habló sobre su trabajo de genealogía en esa región, sus logros y planes para el futuro. Varios se interesaron mucho y algunos que hablan polaco le ayudaron a traducir algunas cosas. Para cerrar la tarde invitamos a Herbert y a uno de sus amigos a cenar.
El lunes nos invitaron a comer en casa de unos amigos de Alex y Eva, estuvimos muy contentos, Inés y Sebastián son muy simpáticos y amables, por sugestión de Alexander, cocinaro el platillo alemán preferido en nuestra familia y les quedó delicioso. Viven a cinco min. de Alex y Eva.
El día siguiente lo pasamos en Kehlheim. ciudad pintorezca a orillas del rio Danubio. En la punta de un cerro está un monumento dedicado a la liberación del yugo de Napoleón en 1813. Por una subida empinada llegamos sofocados al lugar que es un mausoleo de enormes proporciones. Como no ibamos a dejar de subir al mirador que está en la cúpula, después de descansar un poco, subimos 20 escalones al mausoleo y 178 en escalera de caracol hasta el mirador, a donde llegué con la vista nublada de cansancio, sin embargo pude admirar los 360 grados de hermosos paisjes que hacen olvidar las penurias. Arriba encontramos una familia de mexicanos y después de una corta conversación, emprendimos la bajada por la angosta escalinata y comimos en el restaurante que está cerca del mausoleo. Para bajar al río caminamos 5 Km. atravesando un bosque, por lo que no nos cansó la bajada, en lancha de motor atravzamos el Danubio que iba bastante crecido y
visitamos un monasterio muy interesante, ahí encontramos una familia de españoles que estaban pasando trabajos con el idioma, después de ayudarles y conversar un poco sobre su recorrido por Alemania en bicicleta, todos tomamos una embarcación de 500 pasajeros que nos regresó a la ciudad en donde habíamos dejado el coche, fué un paseo muy bonito. Regresamos a Pfaffenhofen justo a tiempo para la cena en casa de Peter y Yolanda que viven a tres casas de Alex y Eva. Todos cooperamos con la comida y estuvimos muy contentos viendo fotos y platicando, sobre todo nos dió mucho gusto ver a Peter tan mejorado.
El 16 después de desayunar salimos a un recorrido de varios días por el noroeste de Alemania. En Ringheim cerca de Frankfurt, en donde vivimos 5 años, visitamos a nuestra vecina, de ahi seguimos al norte y en Emsdetten cerca de Münster estuvimos dos días con Gerda, prima de Guenter, luego y como no disponíamos de mucho tiempo, en Hamm nos reunimos por unas horas con Pavel y su esposa que trabajaron con Guenter en Daimler-Benz por los años 1969-71, después de comer y pasar unas horas agradables con ellos seguimos nuestro camino a casa de Frank, compañero de Guenter en Volvo en 1972-73 con ambos ha seguido la amistad hasta ahora. Con Frank y Edith estuvimos dos noches, desgraciadamente tanto Pavel como Frank, tienen problemas de salud, lo que ensombreció un poco el gusto de verlos, duele ver sufrir a los amigos. Nuestra última visita fué con Helmut e Inge en Aschaffenburg. A ellos los conocemos desde 1973. En todas partes fuimos muy bien recibidos y se nos trató con muestras de cariño dificiles de corresponder, estuvimos muy contentos con parientes y amigos.
El 22 regresamos a Pfaffenhofen, Alexander y Eva tuvieron una exhibicion de tres días mientras nosotros andabamos paseando. Ilona, hermana de Eva les ayudó y aún estaba con ellos, pues se quedó con Eva unos días más, mientras Alex y nosotros nos fuimos a Silesia, Pol., por la tarde los invitamos a comer al "Müller-Bräu" y en la nochecita fuimos todos a despedirnos de Peter y Yolanda que salieron el 23 para México. El mismo día, solo unas horas después nosotros también salimos rumbo a Silesia.
Al pasar por Dresden hicimos una pausa de 2 horas que aprovechamos para ver a Lieselott, prima de Guenter que vive en esa ciudad, como es viuda sin hijos, siempre le da mucho gusto vernos, la invitamos a comer y a la media hora se nos unieron Gerda y su hijo Reinhard. Guenter estuvo muy contento con sus dos primas, una paterna y otra materna, los tres nacieron en Silesia. Después de comer, ver fotos y añorar la juventud, nos despedimos de Lieselott y seguimos nuestro viaje a Silesia, de aquí manejó Guenter las 4 horas que nos faltaban, las primeras 4 horas había manejado Alexander. Reinhard y Gerda nos siguieron, pues ella también tenía ganas de ver su terruño y aprovecharon la invitación de Guenter a la reunión familiar en el Palacio de Tannhausen para hacer un recorrido por la región.
Bad Salzbrunn (Szczawno Zdroj) balneario de aguas termales famoso desde el siglo XVII es a donde siempre llegamos, en la Pensión Wanda ya nos conocen, es la quinta vez que nos hospedamos ahí. Tras aclarar un mal entendido en el numero de habitaciones, nos sirvieron una rica cena, después de la cual fuimos a caminar por la zona de peatones y a sacar unos Zlotys del cajero automático. Esa noche Alex y Reinhard tuvieron que compartir habitacion, al día siguiente Alex recibió la suya.
El primer día llovió todo el día, a pesar de éso fuimos a Friedland (Mierozow) lugar de nacimiento de Gerda y Guenter ahí visitamos a dos conocidas alemanas que por haberse casado con polacos no fueron expulsadas. Las dos familias nos tratan con muchas atenciones, la primera estaba sola y con la segunda, la hija y el yerno después de ofrecernos café y pasteles se pusieron a preparar una deliciosa comida y no nos dejaron salir sin saborearla y eso que llegamos de sorpresa.
Irmgard parienta de Guenter que también viene a la reunión del sábado, llegó de Paderborn con su bebé Aaron y su tía Regina como a las 7 de la tarde, después de 8 horas de viaje, estaban cansadas y con buen apetito, así que nos fuimos luego a cenar, ya no llovía y la temperatura estaba muy agradable, por lo que fuimos a pié al restaurante más cercano (8 cuadras). Irmgard es bisnieta del tío bisabuelo de Guenter que fué dueño del Palacio Tannhaussen a donde va a ser la reunión familiar el sábado 26 o sea dentro de dos días. Ella nació en Namibia, sudoeste de Africa a donde emigró su abuelo en 1925 después de haber nacido y crecido en el palacio. Como se imaginarán estaba anciosa de ver el lugar en donde vivieron sus antepasados y del que había oido relatos en el ceno familiar allá en la lejana Africa.
El 25 fuimos al castillo de Fürstenstein (Zamek Ksiaz) el castillo más grande de Silesia, interesante museo, conjunto de parques y terrazas desde donde se pueden admirar majestuosos paisajes, en varios edificios que son parte del conjunto hay tiendas y restaurantes, en uno de los cuales teníamos reservación para comer, lo que hicimos con toda calma pues estabamos cansados del recorrido que abunda en escaleras tanto en el castillo como en los jardines y terrazas.
Alex y yo nos fuimos a la pensión con Gerda y Reinhard. Guenter llevó a Irmgard y Fam. a enseñarles lo que queda de la estancia de su tatarabuelo (de Irmgard), que aún está habitada, la casa grande es ahora casa de departamentos, la troje y el establo son talleres y en otro edificio también son departamentos. De pasada le enseñó las dos propiedades que fueron de los dos tatarabuelos de Guenter y que también siguen habitadas y los lugares en donde vivieron sus antepasados comunes. Más tarde nos encontramos en el parque como habíamos quedado a tomar un helado.
Sábado 26 de julio. Al fín llegó el gran día de la reunión razón de nuestro viaje. Por la mañana nos dedicamos a arreglar las cosas que ibamos a llevar, en especial lo que habían mandado de Namibia el papá, el tío y una prima de Irmgard, para que ella a nombre de su familia lo entregara en el palacio. Todo estaba tan bien empacado que decidimos abrirlo en el palacio, de lo que nos arrepentimos después. Al fín a la una y media salimos de la pensión en caravana. Cuando llegamos ya estaban muchas personas esperandonos, algunos con camaras y microfonos, después nos enteramos de que eran reporteros de radio,
televisión y prensa locales. Del
palacio salieron los nuevos dueños con sus familias a darnos la bienvenida y bajo el balcón central que está sobre la entrada principal, colgaron una manta que decía en polaco "Palacio Tannhausen - Julio 26 de 2008 - Bienvenida Familia Böhm", flanqueado por los escudos de la antigua Fam. Böhm y de la Fam. Leda, nuevos dueños del palacio.
Entre los presentes de nuestra parte, estaban además de parientes, personas que Guenter invitó porque lo han ayudado en su trabajo de Genealogía y sin ellos no hubiera avanzado tanto como lo ha hecho hasta ahora, no todos pudiero asistir, pero entre los que se encontraban mencionaré a: el padre Stepniak de Czarny Bor (Schwarzwaldau) cronista e historiador de los Behem (siglo XIV), Justyna y Michal, graduados en periodismo de la Universidad de Wroclaw (Breslau) que diseñaron
e imprimieron 4 posters con la historia en fotos y documentos de los Böhm y que Guenter donó al palacio para decorar la salita dedicada a Gustav Böhm y familia. Cada familia emparentada con éste señor recibió una copia reducida de los posters que ya están enmarcados y colocados en el palacio. Los señores Szewczak dueños de la pensión que también nos han ayudado mucho y su hija que como estudiante en una universidad de Alemania, fungió como traductora y lo hizo a la perfección.
Exposición permanente de nuestra historia familiar en el Palacio de Tannhausen (Palac Jedlinka)
Nos pasaron con todos los honores, a la entrada nos ofrecieron algo de tomar y les tenían regalos a Irmgard un libro sobre Silesia en alemán y para Guenter un libro de heraldica de la región, una guía turistica actualizada en alemán y dos cuadros con fotografías de escritos semiquemados de principios del siglo XX, siguió un tour y en cada sala nos explicaba el director del proyecto la etapa y tipo de restauración en que se encuentraba, un historiador de la Uni. Oppeln, dió una presentación de la historia del palacio y su significado histórico a travez de los siglos, pues existe desde 1305.
Varias veces Guenter tomó la palabra y lo hizo bastante bien, también Irmgard pronunció unas palabras de agradecimiento por la invitación y a la Familia Leda en nombre de su familia por haber rescatado el palacio de la ruina. Nos mostraron una exhibición de porcelana fina de la compañía Krister que en el siglo XIX llegó a exportar sus productos mundialmente y esa Fam. Krister también fué dueña del palacio en su época. Finalmente llegamos a la sala de los espejos que aún está en proceso de restauración, llanamente dicho el salón de baile del palacio muy grande y elegante aún sin estar terminado. Ahí instalaron el buffete con variados y exquisitos platillos y mucho de beber.
En ese lugar abrimos lo que había traido Irmgard y que en parte donó y en parte prestó al palacio y que le mandó su familia desde Namibia, tan bien empacado que nos dió mucho trabajo abrir, hasta los periodistas ayudaron y se cubrió la mesa de objetos.
1 Crónica manuscrita del palacio que se empezó en 1892, por encargo del Sr. Richard Warmbt, suegro de Gustav Böhm.
1 copia de la Crónica,escrita en computadora por un amigo de la familia en Namibia en 2008.
4 Albumes de fotografías de cuando la familia Böhm vivía en el palacio
1 Juego de mesa con el que se entretenían en las tardes de invierno, en forma de águila de dos cabezas con alas extendidas y que se se juega con dados. En Namibia aún lo juegan.
1 Copia reducida del juego anterior, los dos enmarcados.
1 Cuadro con la fotografía de un juego de te de plata y champagnera que la familia aún usa y que existe desde los primeros años en Tannhausen a fines del siglo XIX .
1 fotografía de los tres hermanos Böhm en uniforme de oficiales del tiempo del Kaiser/Emperador frente al palacio.
2-3 cuadros más que ya no recuerdo que fotografías eran.
Acercaron una mesa para extender los regalos y en ese momento se arremolinó toda la gente tratando de ver y tomar fotos de los objetos, naturalmente la Crónica manuscrita en el transcurso de 116 años, fué la que despertó más interés.
Los Srs. Leda són tres hermanos que en sociedad con su tío se han hechado a cuestas la labor
titánica y arriesgada de salvar el palacio y conjunto de edificaciones que forman la propiedad. Sin
ellos ese palacio se hubiera convertido en una ruina como lo son la mayoría de las construcciones adyacentes, entre otras los establos, la troje, bodegas y la ruina que más tristeza da ver es la que fué cervecería, ahí se producía, se vendía y consumía cerveza, yo le veo algo griego a la fachada. todo de mampostería y concreto, por lo que la Fam. Leda confía poder ofrecer algo bonito al turismo dentro de algunos años, ojalá logren hacerlo. El único edificio que ha seguido habitado constantemente es lo que fueron las habitaciones de los empleados del palacio, convertido en departamentos.
Irmgard y Guenter fueron entrevistados por los reporteros de prensa, radio y televisión y la tarde se nos pasó como un suspiro. Fué un día que recordaremos con agrado toda la vida, para Guenter fué el resultado exitoso de 8 años de trabajo intenso en la genealogía de su familia, pues el haber logrado tener una sala en el palacio dedicada a ellos, es algo que no esperaba y la recompensa de sus esfuerzos y tenasidad. Alexander también andaba muy contento, lástima que nuestros otros hijos no presenciaron ésto.
Salimos con el compromiso de regresar en Septiembre, pues invitaron a Guenter a ser patrono honorario y miembro del jurado en un concurso internacional de estudiantes de preparatoria que tendrá lugar en el palacio con el tema "Castillos y Palacios en Silesia", naturalmente vamos a hacer todo lo posible por asistir.
Al día siguiente regresamos a Friedland, lugar de nacimiento de Gerda y Guenter y se nos fué el día recorriendola en parte a pie, lo que no pudimos hacer hace tres días por la lluvia. Gerda quería ver su casa , su escuela, etc., como nos acompañaron Justyna y Michal que hablan inglés y alemán, hasta pudimos entrar a la casa en donde vivió Gerda y pasar un rato sentados en el jardín. Naturalmente también fuimos a la casa en donde vivió Guenter, pero no entramos. Justyna también nació ahí solo 40 años después, ahora vive y estudia en Breslau (Wroclaw) pero su familia sigue viviendo en Friedland (Mieroszow). En la tarde comimos en un lugar en la montaña que ha sido visitado por generaciones y que todo el que es de esa región recuerda con cariño. "Andreasbaude".
Irmgard y su tía Regina fueron a Breslau, capital del estado y a buscar el pueblo en donde nació su mamá que era hermana de Regina. En la noche cenamos de nuevo en la zona de peatones en Bad Salzbrunn frente al parque, todo estaba iluminado y se veía muy bonito. Mucha gente con niños disfrutaba la noche cálida de verano.
28 de julio, todos salimos después de desayunar con rumbo diferente, Irmgard y fam. a Paderborn, Gerda y Reinhard hacia Breslau en donde pasaron tres días recorriendo la ciudad y sus alrededores y nosotros a Pfaffenhofen con escala en Dresden en donde estabamos invitados a comer con unos amigos de Alexander que estudiaron con él en la Uni. de Tübingen, tienen dos niños. Birgitt cocinó muy sabroso y nos atendió muy bien, su esposo no estaba pues por cuestión de trabajo se encontraba en China. Como a las 6 de la tarde llegamos a Pfaffenhofen.
Nuestro último día en Alemania se nos fué en empacar, fuimos con Alexander a ver una vez más su bodega y en la tarde invitamos a Herbert y Elsbeth a comer en un restaurante italiano, naturalmente a Eva y Alexander también, antes pasamos a visitar la tumba de mis suegros, Herbert la tiene muy bien cuidada. Como Elsbeth no fué a la cena, nosotros fuimos a su casa para despedirnos, la pobre batalla como puede con el Alzheimer.
El 30 de julio regresamos a USA, volando de Munich a Syracuse con escala en Filadelfia. Tuvimos vuelos tranquilos, solo la comida en el vuelo de Munich a Filadelfia estaba helada, nos dijeron que se debía a la huelga de Lufthansa que se encarga de los alimentos en Alemania, lo principal es que llegamos sanos y salvos aunque con media hora de retraso a Syracuse en donde nos estaba esperando Laura. Marcus no maneja de noche. Al día siguiente los niños felices de vernos con gusto recibieron sus regalos.
Reunion familiar 26 de julio de 2008 en el Palacio de Tannhausen